lunes, 2 de noviembre de 2015

Restaurante vegetariano Maná

Este local se encuentra en C/. Federico Balart, 1-3 en calle salón (Murcia). Abierto desde 2004, Maná es el restaurante vegetariano más antiguo de toda Murcia. Decidimos visitar este local porque en su carta siempre incluye varios platos veganos, todos ellos marcados con una "V". A continuación, os contamos cómo fue nuestra experiencia.


Decoración:

El restaurante cuenta con una decoración, a nuestro gusto, bastante bonita y agradable. Las paredes visten tonos cálidos que lo hacen muy acogedor, al igual que las plantas, que le dan el toque de "naturaleza" al restaurante. Además, las planchas coloridas del techo lo hacen moderno.



Servicio: 

A pesar de ser sábado al medio día y estar el restaurante abarrotado, los camareros fueron rápidos y eficaces, además de educados y atentos. Por el contrario, y a pesar de tener mesa reservada, no pudimos pedir dos platos que se incluían en el menú porque no les quedaban. Y eso un sábado al medio día no puede pasar en un buen restaurante.

Cocina:

Al medio día tienen un menú amplio con bastantes platos tanto veganos como vegetarianos, que incluye buffet libre de ensalada. Por las noches sin embargo es a la carta.

-Ensalada Buffet: disponen de una gran variedad de ingredientes para hacer las ensaladas al gusto, entre los que se encuentran pasas, pipas de girasol, germen de trigo, levadura de cerveza, lechuga, col, pimiento, zanahoria, remolacha, olivas, tápenas, maíz, col lombarda, cebolla, etc... así como 3 salsas (piña, yogur y la única vegana, una deliciosa salsa rosa) y demás aliños.





- Crema de verduras ecológicas: una cremita suave, ideal para abrir el apetito, con ligero sabor a calabaza.

- Croquetas de tofu con verduras: que no os engañe el plural, eran croquetas sí, concretamente dos. Eso sí, deliciosas.





- Risotto de verduras, setas y tomates secos:  hay que reconocer que, a pesar de que el risotto está cogiendo gran fama y ya puedes encontrarlo en muchos establecimientos, no probarás ninguno como éste. Inmejorable.





- Saquito de brick con verdura y gluten: el plato en realidad llevaba queso mozarela, pero le dijimos que no se lo echaran para que pudiese ser vegano. La idea es original, ya que la presentación es muy apetecible, pero el sabor no ofrecía nada nuevo. Estaba bueno sí, pero no dejan de ser verduras cocinadas.





- Copa romántica vegana con natillas, bizcocho y pera: la mezcla resultante de estos ingredientes era muy sabrosa, aunque a nosotros nos hubiera gustado más sin pera.





- Natillas de algarroba: sencillas pero exquisitas. Un regalo para el paladar que nada tiene que envidiar a las de cacao.




* El menú incluye una infusión a elegir entre una gran variedad de opciones.

Presentación:

La presentación de los platos está muy trabajada. Algunos de los platos no tenían gran cantidad de comida, pero al incluir tantos el menú, podemos decir que acabamos bastante llenos.

Precios: 

La relación calidad-precio que ofrece el menú es insuperable. Buena comida a buen precio: 12,50 € por menú/persona.

NOTAS:

Decoración: 9
Servicio: 8
Cocina: 9
Presentación: 9
Precio: 10

MEDIA:  9 SOBRESALIENTE